Las lentillas o lentes de contacto son uno de los inventos más ingeniosos y útiles de la historia.
Desde los tiempos del visionario Leonardo da Vinci que diseño un primer boceto han pasado muchos años. Es una bonita y sorprendente historia.
Tras muchos años ejerciendo como Optometrista especializado en la adaptación de lentes de contacto, me sigue maravillando que se pueda conseguir una visión perfecta con un “Pedazo de Plástico” en el ojo y que al mismo tiempo sean muy confortables y seguras.
Es algo casi mágico que damos como normal, pero que requirió muchos años de desarrollo e investigación. Merece la pena que conozcas esta historia añadida a la categoría de “Noticias Curiosas”.
Podrás conocer los primeros bocetos de Leonardo da Vinci, las primeras lentes de contacto de cristal comercializadas en 1927, quien inventó las famosas “lentillas rígidas” y “las lentillas blandas”, así como la cantidad enorme de dinero que pagaron (en su época) los más prestigiosos laboratorios por conseguir sus patentes.
Los precursores de las Lentes de Contacto. Primeros diseños y bocetos
1508. Leonardo da Vinci diseña el primer boceto
Alrededor de 1508, “El Genio” Leonardo da Vinci consideraba que los ojos eran el órgano más importante del cuerpo humano y añadió en el margen de uno de sus escritos un dibujo de un sistema óptico consistente en una semiesfera de vidrio llena de agua con un rostro sumergido en esta. Leonardo dibujó también unas lentillas semejantes a las actuales, así como la ampolla de cristal desde la que debían tallarse.
Sobre esa base, René Descartes, en 1636, diseñó un tubo con una curvatura semejante a la de la córnea, lleno de agua, por el que se miraba. Casi dos siglos después, en 1823, el astrónomo británico Sir John Herschel, sugirió la creación de una lente con la forma del ojo que se adaptara al mismo.
1927. Se comercializan las primeras lentes de contacto de cristal
La primera lente de contacto, como tal, fue desarrollada por el fabricante alemán de prótesis oculares (ojos artificiales de cristal) F.A. Müller. Su lentilla era un cristal transparente para proteger el globo ocular.
A partir de ese principio, el médico suizo Adolph Eugen Fick desarrolló unas lentes de cristal rellenas de líquido, realizando moldes usando como cobaya sus propios ojos.
Adolph W. Müller-Welt empezó a fabricar lentes esclerales de cristal soplado a mano en Stuttgart desde 1927 y su laboratorio Müller-Welt Contact Linsen producía amplias gamas de lentes de prueba. Eran muy grandes e incómodas y se toleraban pocas horas.
Se populariza el uso de las Lentes de Contacto
1938. Llegan las lentes rígidas de material plástico PMMA
En el desarrollo de las lentes de contacto, supuso un avance extraordinario el descubrimiento de los nuevos polímeros plásticos transparentes, en particular del polimetil metacrilato (PMMA), a finales de la década de 1930.
Este material tenía una transmisibilidad luminosa igual a la del cristal, era duro y poco moldeable, resistente al rayado, químicamente inerte, con un peso equivalente aproximadamente al 40% del peso del cristal.
Llegaron las famosas lentes de contacto rígidas para quedarse durante muchos años entre nosotros, ya que a pesar de ser incómodas durante el proceso de adaptación, la visión era muy buena y la tolerancia mejor que con las lentes de cristal anteriores.
1950-1971. Inventan las lentes de contacto blandas o hidrofílicas y surge el primer baile de patentes
En la década de 1950, un químico checo llamado Otto Wichterle inventó un polímero llamado HEMA y lo utilizó para crear una lente de contacto más flexible con un alto contenido en agua.
Un optometrista americano muy emprendedor llamado Robert J. Morrison se dió cuenta del enorme potencial de este nuevo material y viajó a Checoslovaquia, en donde compró al gobierno checo los derechos de fabricación de lentes de HEMA según la técnica de Wichterle por unos 330.000 dólares estadounidenses.
El siguiente paso consistía en encontrar un fabricante para desarrollarlas, pero pocos se mostraron interesados.
Dos inversores, que eran también abogados de patentes, Martin Pollack y Jerome Feldman, propietarios de la empresa National Patent Development Corp. (NPD), y que no conocían nada sobre lentes de contacto, se dieron cuenta del potencial de este producto y le compraron a Morrison los derechos sobre el mismo por un millón de dólares.
Morrison obtuvo un buen beneficio, pero el de National Patent Development fue aún mayor. Tras intentar que varias empresas importantes de óptica se interesaran por este tipo de lentes, consiguieron por fin que Bausch & Lomb adquiriera la patente por tres millones de dólares (en 1967).
Gracias a este nuevo material la tolerancia mejoró de un modo espectacular y se popularizó enormemente el uso de lentillas. A diferencia de las lentes rígidas, este tipo de lentes de contacto eran muy cómodas desde el primer día y permitían hacer deportes sin riesgo de que saltasen del ojo.
Nota resumen: A partir de 1971, gracias la comercialización de las primeras lentes de contacto blandas de Hidrogel (blandas) el número de usuarios aumentó de un modo espectacular.
1970. Salen al mercado las primeras lentes de contacto Rígidas Permeables al Gas
Estas lentes mejoraban mucho el PMMA de las lentes rígidas existentes hasta esa fecha porque permitían que a través del mismo pasase una gran cantidad de oxígeno, previniendo los edemas corneales que eran bastante frecuentes con las lentes duras. El inconveniente es que se deformaban más fácil porque el material plástico no era tan estable como el PMMA.
Poco a poco se han ido resolviendo estos problemas y actualmente son una muy buena alternativa para los usuarios, ya que combinan una muy buena calidad de visión y salud ocular. Es una opción muy recomendable para ciertos casos.
1982. Aparecen las lentes de contacto desechables y continúa el baile de patentes.
A principios de 1980, un oftalmólogo danés llamado Michael Bay ideó una manera de fabricar lentes blandas desechables(de hidrogel) con una nueva tecnología que permitía abaratar mucho los costes de fabricación, creando una lente llamada Danalens. Vistakon (Johnson & Johnson) compró esa tecnología y Michael Bay se hizo millonario.
En 1987, Vistakon (Johnson & Johnson) hizo historia lanzando la primera lente desechable quincenal llamada Acuvue, con un éxito tremendo, ya que el cambio frecuente(en este caso eran lentes quincenales) mejoró mucho la comodidad y la salud visual de los usuarios, porque se evitaban los problemas derivados de usar lentes deterioradas o con depósitos.
A partir de esa fecha, los demás laboratorios de Lentes de Contacto investigaron para lanzar productos similares.
Aprovecho para dejaros un comentario que me ha hecho un compañero y amigo optometrista que domina muchísimo mejor que yo todo el tema de materiales ópticos, ya sea en lentes de contacto como en lentes oftálmicas. Ramón Solá complementa esta información con este importante dato:
Acuvue aparece en su día como régimen de uso continuado por seis noches. FDA exigió que hubiese esa otra opción de uso diario y reemplazo quincenal. Y si, la clave es el reemplazo frecuente, en las quincenales, y disminuir la manipulación, en las de uso continuado por seis noches. Un único uso extendido.
Nota resumen. El empleo de lentes de contacto desechables ha significado un paso de gigante en beneficio de la Salud Visual, ya que siempre que estén bien adaptadas, mejoran la comodidad, permiten un horario de utilización más alto y evitan problemas relacionados con el envejecimiento de las lentes blandas no desechables.
Ramón García dice
Hola Bárbara,
El año exacto no lo sé pero sería a finales de los 60 o primeros de los años 70 y eran lentes de contacto rígidas.
Saludos y gracias por seguir el blog
Ramon dice
Por supuesto, Ramon!
LUIS BARRIOS dice
lO MALO LA FALTA DE ETICA Y DEONTOLOGIA DE LAS COMPAÑIAS DE LC, COMO COOPER, X-CEL, B&L, AlCON……NO TIENEN ASESOR CONSULTOR EN LENTE DE CONTACTO EN LOS PAISES DONDE DISTRIBUYEN SUS PRODUCTOS….COMO PUEDE LA FDA Y COMISION EUROPEA DE SALUD PERMITIR SEMEJANTES ARBITRARIEDADES….
Ramón García dice
Hola Luis,
Hasta donde yo sé si tienen consultores y asesores técnicos en los países donde distribuyen sus productos. Conozco de primera mano el caso de España y Portugal y tiene no uno sino varios asesores bien cualificados. Otra cosa es que den una información más o menos interesada y que los profesionales deberemos de consultar.
Por supuesto estoy hablando a nivel de profesionales. Si eres un no profesional el asesor que te puede ayudar siempre debe de ser tu optometrista ya que se necesita controles «In Situ» para poder valorar cada caso de modo personalizado.
Saludos y gracias por seguir el Blog
Ramón García dice
Hola Luis,
Hasta donde yo sé si tienen consultores y asesores técnicos en los países donde distribuyen sus productos. Conozco de primera mano el caso de España y Portugal y tiene no uno sino varios asesores bien cualificados. Otra cosa es que den una información más o menos interesada y que los profesionales deberemos de consultar.
Por supuesto estoy hablando a nivel de profesionales. Si eres un no profesional el asesor que te puede ayudar siempre debe de ser tu optometrista ya que se necesita controles «In Situ» para poder valorar cada caso de modo personalizado.
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